He visto esta película del director italiano Nanni Moretti. Cuando me mostraron por primera vez el trailer tengo que reconocer que me llamó la atención. La idea es buena. El Papa muere y el cónclave se reúne para elegir al siguiente Pontifice. Tras unos días es elegido un cardenal bastante desconocido. Justo antes de salir al balcón de la San Pedro le da un ataque de pánico y se niega a aparecer en público. Para solucionar el problema convocan aun psicoanalista, ateo, para atender al nuevo Papa.
Hasta ahí todo parece correcto, incluso de ver cómo el Papa se da a la fuga por Roma, mientras que los purpurados continúan encerrados en el Vaticano.
Me acordé, un poco, de "Vaciones en Roma", pero en vez de una princesa disimulando tenemos a un pontífice perdido, en todos los sentidos. Y, para mí, el problema es la gente que se encuentra. O por lo menos no veo ninguna relación entre las escenas y el desarrollo de la película.
Por otro lado, el encuentro con el psicólogo me defraudó. No sé que esperaba, pero está claro que no lo que vi. Una persona que sólo hace una pregunta y que queda reducido a gerontólogo y árbitro de voleyball. Y ni eso, por que el grupo de cardenales es irreal. Es un grupo de viejetes preocupados en jugar a la escoba y tomar somníferos. Y que no sólo están recluidos sino que la realidad parece importarles poco. Que quieres que te diga, reconozco que no todos los prelados me caen igual de bien, pero hay que reconocerles que detrás tienen una vida de estudio y trabajo, y de relaciones humanas, ya que nos ponemos. A Moretti parece que eso se le olvida. O prefiere olvidarlo.
En fin, una película que no puedo recomendar, y mira que la idea prometía. No vayas al cine a verla. Espera a que salga el DVD. Encuentra un grupo de personas que quieran verla y comprarlo a partes iguales. De esa forma creo que se minimizará la sensación de dinero perdido. Pena de oportunidad perdida
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