Una de cine: "The Joneses" (2009)

¿Qué es lo más importante en la vida?

Hace un par de semanas el evangelio nos trasmitía una de esas frases redondas de Jesús: "Allá dónde esté tu tesoro estará tu corazón". O como leí hace poco en Twitter: "Lo que posees terminará poseyéndote". No soy tan extremista para pensar que la segunda frase siempre sea cierta, pero si me creo más la primera. Sobre todo porque es una frase mucho más optimista y que te da la oportunidad para revisar.

Pero si es cierto que el consumismo (y el caprichismo como siguiente nivel) es algo que está haciendo mucho danño. "Eres lo que consumes" podría ser  el resumen y definición de "homo consumidor". Tener lo último el mismo día que sale es algo que se está convirtiendo en habitual. Sólo hay que ver las colas que ha provocado ese teléfono con problemas de antena o la versión con esteróides que en estos días ha provocado delirios.

Recuerdo que, hace unos años, hubo un teléfono que se puso de moda por el hecho de aparecer en la película "Matrix". Después del estreno pude ver varios de esos teléfonos en Madrid. El cine ha sido un lugar donde se nos proponían marcas y cosas concretas. De hecho tengo entendido que las grandes marcas pagan para que aparezcan sus productos en las películas. Coches, relojes, ropa... todo publicitado y al alcance del consumidor.

Y siempre surge la misma pregunta...¿teniendo mucho se es feliz? ¿teniendo de todo tenemos lo que necesitamos? ¿tener nos da felicidad?

Ese es un poco el transfondo de la película "The Joneses" (no estoy seguro si ese es el título en español) protagonizada por David Duchovny (Mulder en "Expediente X") y Demi Moore ("La Teniente O'Neill"). Una familia modélica, exitosa, que se muda a un nuevo vecindario. Lo más peculiar de esta familia son las cosas que tienen. Todo lo último y lo más caro. Peor lo que parece una buena familia es un montaje. Son cuatro "desconocidos" que se dedican a hacer publicidad de las mejores cosas que hay en el mercado. Dicho de otro modo, les pagan para que sus vecinos consuman. Cada miembro de la familia tiene un mercado que trabajar y unos productos que vender.

Los primeros minutos de la película son para ver la profesionalidad de los cuatro, que consiguen convencer a todos para que empiezan a comprar, cremas, ropas, "gadgets" tecnológicos, incluso potentes deportivos.

Pero lo mejor empieza cuando la película presenta los problemas de los miembros de la familia y de los vecinos que se dejar arrastrar por el consumismo. No todo es felicidad y bienestar. Lo que parece estar en la cumbre se convierte en un "más y más" que puede con alguno.

Sin duda una película que, ya desde el principio, critica el consumismo, la economía de mercado y los deseos de tener de las personas. Al mismo tiempo plantea las preguntas de qué es lo más importante en el seno de la familia o con los amigos.

No quiero contar más, por eso de no destrozar la película. Pero si que es una buena recomendación para ver un sábado o un domingo. Mejor si se hace en familia. Mejor aún si después la familia opina