¿Vemos una peli?

Parece que los astros se han conjurado conmingo. O contra mí. No lo sé. Este domingo pasado el Evangelio daba una idea clara y sencilla, y que no admite mucha interpretación :"Denles Ustedes de comer".

Como digo poco se puede decir de esa frase. Un niño con dos panes y cinco peces alimentó a más de 5000. Frente a la postura normal entre los creyentes de lanzarle la pelota a Dios o Jesús, él nos la devuelve y nos hace responsables a nosotros de que la gente pueda comer.

Y lo podríamos dejar ahí. No hace falta más. Pero anoche vi otra aplicación de este evangelio gracias a una película. No sé como será en español, ya que la ví en versión original pero lo importante se mantiene sea el idioma que sea. Se trata de una pelicula de animación. Y antes de que me digáis nada, los propios diseñadores de peliculas (Walt Disney, Pixar y no hablemos de Ghibli y compañia) reconocen que ya no hacen peliculas de "Dibujos animados", sino que hacen animación para que toda la familia disfrute. Y para ello manejan un doble lenguaje. Dicho de otro modo: los niños se reirán de algunos chistes y los adultos se reirán de otros que los infantes no acaban de captar.

Pues bien esa película es "Happy Feet". En la tierra de los pingüinos cada uno de ellos tiene que que encontrar su canción. Pero el problema lo tiene Mumble, que no sabe cantar, pero es un gran bailarín de claqué. Eso le acarrea problema en su comunidad, aferrada en extremo a sus tradiciones.

La película es simpatica, con buena canciones y momentos de humor, sobre todo a cargo de cinco pingüinos latinos. Pero hay un momento que nos puede hacer reflexionar. Los pigüinos tienen un problema serio ya que se están quedando sin comida por la pesca intensiva de los hombres.

Y volviendo al principio, el "dadles vosotros de comer" ya no es sólo para nuestros hermanos humanos, sino que es responsabilidad de de todos también que la comida llegue a todos los hermanos, a toda la creación.

La película es una buena forma de recordar la necesidad de cuidar la creación en la que el Señor no ha colocado. Si somos los que más dones hemos recibido, mayor es nuestra responsabilidad para la conservación de la naturaleza. Y una buena forma de recordarselo a los peques.

Está claro que nosotros sólo no vamos a poder solucionar los grandes problemas, pero si que podemos poner nuestro pequeño grano de arena para ayudar al cuidado y coservación de la naturaleza. Hay muchas formas sencillas de hacerlo: reciclaje, disminución del gasto...

Por eso os la recomiendo. Además que es entretenida. Eso sí. Creo que entra dentro del género musical. Pero las versiones de las canciones están muy logradas.

Y este vídeo de propina

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